También conocido como:
"Saturno devorando a su hijo".
Es una obra de gran realismo, que muestra al dios "Saturno", de la mitología romana y con frecuencia asimilado a otros dioses griegos. En la escena, el personaje está devorando a uno de sus hijos, ya que fue informado que uno de ellos lo destronaría, el único que quedó vivo fue Zeus, el cual efectivamente lo destronó en funciones e importancia.
Conocida es la versión de
Goya del mismo título, aunque no demuestra ni la sombra de la pericia exhibida por Rubens.