Se trata de un paisaje gélido y nublado situado en el río Adur, en las inmediaciones del poblado de Ruan, Francia. En primera línea dos embarcaciones pequeñas, las humeantes chimeneas de fábricas y barcos determinan la composición partiendo el lienzo en diferentes ángulos y dándole movimiento. La coloración de la obra es casi monocromática, con la excepción de algunos puntos de color.